Aquí llega una orquesta para los amantes de la salsa de la vieja escuela. En Italia, cuna de muchos proyectos bastante flojos en los últimos tiempos que se caracterizaban por una banalización de la música afro-caribeña, en donde nace la idea de la Máxima 79, en la mente de un genio llamado Fabrizio Zoro, con los arreglos del pianista Massimo Scalici.
Fabrizio Zoro es DJ, bailarín y músico, cualidades que se ven reflejadas en esta Orquesta y su magnífica producción de principio a fin; arreglos con cortes que enloquecen al bailador en la pista, solos de piano de ensoñación y una cadencia que invita a moverse.
La Máxima 79 trae de vuelta la era dorada de la salsa. Fabrizio Zoro tiene muchos años de experiencia de girar como DJ en festivales y fiestas de toda Europa. Él es también un percusionista muy establecido y creó la idea de este proyecto.
Massimo Scalici es uno de los mejores músicos de salsa de Italia, es el responsable de todos los arreglos de la orquesta, crea las orquestaciones para todos los músicos y toca el piano en todas las pistas. En realidad no estaba familiarizado con el estilo "Guaguancó" de los años 60 pero muestra su enorme talento para, no sólo adaptarse a este estilo, sino simplemente llevarlo a otro nivel. Le da una enorme sabiduría musical a La Máxima 79. Sus influencias crean una combinación de canciones vibrantes y eléctrizantes que dan a su sonido un ingrediente adictivo, por la calidad de la música que hacen, salsa de la vieja escuela en nuevas formas.
Tres vocalistas le dan un elemento distintivo, El Guille (La Fiebre Latina) con un estilo que evoca a las viejos combos de los 70’s, Leo Wilber, con un acento más cubano a ritmo de son montuno y cha cha cha y El Bandera que completa el combo.
Respecto a su primera producción puede decirse que el tema "Pobrecita", producida de dos formas (sonido normal y con efecto de vinilo) y vocalizada por El Guille, es sin duda uno de los éxitos en esta producción. "Singapore" Vibes es un latín jazz con el vibráfono de Fabrizio Francoforte como protagonista principal, "Lápiz y Papel", numero autobiográfico a ritmo de cha cha cha, dedicado al músico Rodolfo Guerra (Sincopa Latina).